domingo, 30 de junio de 2013

Por fin llegó el gran día…

18:45. Esa es la hora a la que fuimos citados uno de los días mas grande de nuestro conjunto caletero, el día de la boda de nuestro presidente. Antes de esta hora, viene clásicos momentos de tensión como: “joder con el nudo de la corbata”, “Ay! Que se me arruga la camisa”,”Cari, en cinco minutos estoy lista”. Para relajar tensiones algunos decidimos ir a refrescarnos un poco antes de coger camino para el gran acontecimiento.




Algunos se decidieron por el calibre clásico mientras que otros apostaron por un calibre mayor. Aquí los nervios se relajan un poco, pero sabemos muy bien lo que viene más tarde.  Tras varios brindis, piropos y risas llega el momento. 



Nuestro transporte hace acto de presencia y los integrantes nos preparamos para el viaje que concluirá con el desembarco de las tropas en la zona Cero. Tras casi dejar en tierra a tres compañeros, finalmente con algo de retraso, nos pusimos en marcha. En este momento los nervios vuelven a aumentar. Piensas en el traje de ella, en el de él, en quien será el primer integrante que caiga…


Llegamos a la hacienda Los Miradores, no sin antes chocar el bus con la puerta de la hacienda,   y tras atravesar un túnel, todo cubierto por plantas, y subir unas escaleras llegamos a la zona de la ceremonia. 


Ya llega ese momento del que tanto se ha hablado en estos meses. Es el momento del compromiso. Allí aparece el eterno presidente para dirigirse a su asiento.


Tras unos minutos de espera aparece la novia. 



 Miran a su alrededor y observan a todos los que les rodean: Amigos, familiares… todo el mundo está allí para verlos a ellos, para celebrar a su lado uno de los momentos más bonitos en la vida del ser humano.







Tras diversas intervenciones de familiares y amigos, nuestro vicepresidente lee unas palabras a la feliz pareja. Dedicó unas emotivas palabras a los novios, recordando grandes vivencias y sentimientos compartidos entre ellos. Tras varias lecturas más se confirma el éxito de la misión para la que fuimos convocados: Ya son Marido y Mujer!!


Se acabaron los nervios y la tensión. La misión ha sido un éxito y ahora solo queda celebrarla como se sabe. Con un gran banquete. En estos momentos, la novia recibe la mayor cantidad de besos por minutos de toda su vida y el traje del novio empieza a arrugarse entre tantísimos abrazos. Pero ya todo da igual, ya están casados.


El banquete siempre es distinto allá donde vayas, pero la estrategia siempre es la misma. Hay que buscar el mejor punto estratégico de la zona. Quieres sombra y localización visual de los camareros que pasan con la comida y la bebida. Hacemos el clásico pasillo al camarero forzándole a recorrerlo, varios intentos de camelarte al camareros para que siempre venga a ti, si ves algo apetitoso no vas a esperar a que llegue. Bebimos mucha cerveza y comimos casi de todo. Jamón, caña de lomo, abodo, dátiles con beicon, pinchitos de langostino, pinchitos de ternera, croquetas de salmorejo, salmorejo de fresa, delicias de salmo, canapés de queso, pisto y más cosas que no recuerdo…


Luego ya pasamos a la zona de las mesas para seguir degustando el menú elegido por los novios. Primero cada mesa celebraba su particular brindis por los novios, intentando ser la mesa que más se escuche en la sala y la gente diga: “eso son los que lo parten…” La comida es un manjar: Crepes de salmón para empezar y solomillo buey para terminar. Todo esto acompañado de los clásicos paseos por las mesas para enterarte de que se cuece por cada una de ella. Tomamos el postre, tulipa de helado de turrón y ya poco más queda por hacer en esta zona.


A continuación sorprendían a los novios con un par de videos, y posteriormente realizaban su primer baile como recién casados. En este momento empezaba la barra libre. Esta es una etapa clásica de las bodas en la que la gente se desinhibe y empiezan a calentar el pico. 






Se dan grandes momentos de bailes y lo más importante, muchas risas. La gente se divierte, se lo pasa bien, está feliz.  Y si encima les pones una cámara y cosas para disfrazarse se dan situaciones como las que os mostramos.




Pasan las horas y allí seguíamos… Hasta cuándo?  Hasta que el cuerpo aguante. Iba siendo hora de reponer un poco de fuerza con pasteles, montaditos y algún que otro plato de papas con huevo.  Y sin darnos cuenta siquiera, salía el sol. Mientras esperábamos a que el autobús volviera para dar el último viaje, continuábamos la fiesta los presentes. Algunos nos poníamos a cantar, otros a descansar y otros a otra cosa.





Ya llegó el bus y volvimos a Sevilla, a la rotonda donde todo empezó. Algunos decidieron irse a sus casas, otros a desayunar… Esto ya ponía el punto y final a este gran día.
Desde aquí poco más que contar. Así que no hay mejor modo de terminar que con un clásico:
VIVAN LOS NOVIOS!!!!

Sergio Dragón.

PD: a medida que vaya recibiendo mas fotos las iré incluyendo.

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Hay fotos de los que cantaban, de los que decansábamos...dónde están las de los que hacían otras cosas?
;p



Los Reyes de Marruecos!!

Anónimo dijo...

Enhorabuena Kikón y Angie, caleteros por excelencia. Fue un placer compartir con vosotros el tan maravilloso momento.

Viva el matrimonio y viva el Sporting!

PD: Debemos el himno por Michael Jackson.

Luis.a

Anónimo dijo...

genial sergio... enhorabuena a los novios !!! me lo pase de p.m. ...... y la entrada d la novia mientras ro y el macias cantaban .... momento inenarrable

Anónimo dijo...

Gran crónica Dragón!!
Un gustazo haber compartido ese momento tan importante de mi vida con mi gente. Como todo el mundo me dijo, todo salió de maravilla. Sois grandes y os quiero al jierro!!!
GRACIAS por todo!!!
Kikón, esposo de Angie

Anónimo dijo...

Enhorabuena!!!! Gran dia rodeado de grandes amigos. Organinzacion perfecta, como todo en lo que esta metido la kika, sin quitarle meritos a angie. Momentos espectaculares los vividos ayer.
Nos salio perfe el himno cantado al unisono! Jejejej.

Oqm!!!

22 manugenio

Anónimo dijo...

Por cierto, que sepáis que me fijé la mayoría de los caleteros llevaban algo celeste en referecia al club de sus amores: corbatas, camisas, chapas... Un detalle grande.
Oqm!!
Kikón

Anónimo dijo...

buena cronica sergio...que decir de una boda tan espcial...de las mas emotivas..divertidas...con mas detalles y sorpresas...y con un jamon y baco en palito que quitaba el sentio...momentos inolvidables...felicidades kikon y angie por sellar vuestra amor con la compañia de quienes os quieren...seba

Anónimo dijo...

Buenisima crónica, buenisima gente, buenisimos novios, buenisimo el sitio, buenisima papa, comida... gran de boda, me lo pase del carajo¡¡


Pepe pandereta¡¡¡

Anónimo dijo...

Puntazo lo de la maquina de las fotos, y ahora que tengo las doscientas y pico mejor todavia, se ven quien eran los abonados al photocall o fotojarl jajajajjaja

Pepe pandereta

Anónimo dijo...

Bueno, la esposa del fundador y presidente honorífico de este club, acogedora en su propia casa del visitable Museo Caletero, escribe estas letras en agradecimiento a tod@s aquell@s que hicisteis del de nuestra boda el día más feliz de nuestras vidas, compartiendo con nosotros la alegría de habernos convertido en pareja oficial a todos los efectos. Sergio, tus letras, tan bien ilustradas con esas imágenes, nos llegan al alma caletera. OQM a todos!

Angie.