Noche de ronda-da

Se presentaba complicado el encuentro de anoche. El número trece rondaba las mentes caleteras y traía sabores amargos de derrota. El equipo lo sabía y llegó a Τάρτησσος con la precaución de un indígena ante la llegada de los fenicios.
Olvidemos que eran uno menos durante muchos minutos de la primera parte, que la media de edad era 45 -con una desviación típica de 1,2414- o que expulsaron a uno de ellos; lo importante es que tuvimos fe y conseguimos el pase de ronda. El Sporting de la Caleta obró el milagro.
Luisito, el hijo secreto de Hiroyuki Tomita o Valery Liukin -seguimos a la espera de las pruebas de DNA-, abrió el marcador en un comienzo trepidante tras recibir un pase en el área pequeña.
El rival no se echó -sin hache esta vez, Inmotota- atrás y, como yo me esperaba, nos hizo el empate. Pero el hijo de Hiroyuki -o Valery- estaba rondando el área rival. Y cuando Luisito dice que quiere marcar no hay quien le quite esa idea de la cabeza. Así lo hizo al saque de un corner, empalmando -con perdón- un balón que le llegó a sus botas.
Nunca fue fácil una victoria caletera. El 2-2 no se hizo esperar pero tampoco el resurgir del Sporting con otro gol de Kikón de falta, que lo ha convertido en el Beckham de la calle Céfiro, aunque su dedicatoria fuera más del estilo Torres -¿eso significa que nuestra futura Presidenta se llama Victoria y no nos lo ha dicho?-
El 3-2 no podía durar mucho. Sí, afición, los rivales no eran cojos y aprovechaban todas. Nos colaron un par de goles y pusieron el 3-4 en el marcador.
La negatividad rondaba entre nosotros cuando Nico igualó el encuentro con un disparo que tras varios rebotes se coló en la meta rival. Ya con los rivales rondando el coma por agotamiento, Alberto puso el 5-4 tras un buen disparo cruzado que se coló directo.
Todo el equipo estuvo brillante, cada uno aportó lo que pudo. Nicolaidis Amazing rondó su alto nivel de siempre. Alberto estuvo rapidísimo y contundente. Juanjo fue vertical y defendió como siempre. Luisa puso su corazón al servicio del equipo, como sólo él sabe hacerlo. Manufet no falló nunca, evitó varios goles. Borja se convirtió en uno de los héroes del partido parándolo todo en una noche épica -estuvo a punto de perder la virginidad por su equipo-.Manugenia la tocó y dio pases que crearon peligro. Bigote renunció al ataque para rozar la perfección en sus tareas defensivas.
El remate final del encuentro jamás podía ser imaginado. El 6-4 de Luisito, en jugada con Alberto, desató la explosión de júbilo del equipo celeste. Y ahí estuvo el hijo del japonés -o el ruso- para dejar boquiabiertos a los presentes en la voltereta más olímpica y caletera que se haya dado jamás. La pirueta sorprendió a unos rivales estupefactos que estuvieron a punto de llamar Willy al acróbata. La afición estalló y Cristo estuvo a punto de ser expulsado por el Shin Shan del silbato. Lucas cerró los ojos, rezó mirando al cielo -no sabemos a quién- pidiendo que el Universo se conjurase y le diera fuerzas para volver a ver un espectáculo como el que vivió anoche. Y Kikón pasó de poder convertirse en bigoleador del encuentro a algo de mucho más calado. En la última jugada del partido, el Deivid de Céfiro se quedó solo ante el portero rival. El peligro rondaba la meta Kevin cuando al Abuelo convirtió a Kikón en un mito. ¿Iba a marcar el 7-4? ¿fallaría tan clara ocasión? Gracias, abuelo, por dejarnos con la incógnita el resto de nuestras vidas. Tu arbitraje rondó la perfección.

Brujito Moisés 10

p.d.: cuando acabó el encuentro, nos fuimos de ronda cervecera. Cuando acabamos, yo seguí de ronda, en su última acepción ¿y vosotras? ¿y vosotros?

Rondar:
1. tr. Dar vueltas alrededor de algo. La mariposa ronda la luz
2. tr. coloq. Andar alrededor de alguien, o siguiéndole continuamente, para conseguir de él algo.
3. tr. coloq. Amagar, empezar a sentir algo. Rondar el sueño, la enfermedad
4. intr. Andar de noche paseando las calles. U. t. c. tr.
5. intr. Dicho de los mozos: Pasear las calles donde viven las mozas a quienes galantean. U. t. c. tr.
6. intr. Andar de noche visitando una población para impedir los desórdenes. U. t. c. tr.
7. intr. Mil. Visitar los diferentes puestos de una plaza fuerte o campamento para cerciorarse de que el servicio se desempeña en ellos con la debida puntualidad.
8. intr. Ext. Montear de noche.